Sebastián Larocca

En diciembre del año pasado, Renzo Grasso sufrió la rotura del ligamento anterior cruzado de la pierna derecha. “Carucha” viajó a Mendoza donde fue operado por el doctor Flavio Rodríguez y continuó apoyando a sus compañeros desde Argentina, donde eligieron junto al club italiano que sea el lugar de su recuperación, que todavía tiene para unos tres meses.

El Nápoli ganó la Zona D de la Serie A2, donde todavía restan dos fechas, y se aseguró el ascenso a la máxima categoría. “Carucha” todavía tiene un año más de contrato con su club, donde continuará la próxima temporada y así se convertirá en el primer mendocino en jugar en la Serie A de Italia, tras la experiencia de Kike Oropel, hace ya más de veinte años.

“Es el primer ascenso a la Serie A. Gané la Serie B con Marigliano y después con Fuorigrotta. Si bien he tenido varios contactos con equipos de la Serie A como el Acqua & Sapone, que me quiso, siempre he tenido problemas con los equipos dueños de mi pase, que no me dejaron ir”, le contó Grasso a Pasión Fusal.

“De la lesión llevo tres meses y diez días. Estoy bastante bien, con ganas de volver, pero con la tranquilidad de hacerlo a su tiempo y no apurarme. La idea con el club, con el cual tengo un año más de contrato, es que viaje el mes que viene a Italia para que me revisen. Y en agosto volver para empezar la pretemporada al cien por ciento”, explicó el jugador de 26 años.

“Poder jugar en la Serie A de Italia es un premio bastante lindo, me pone muy contento, sé que puedo abrirle puertas a otros chicos de Mendoza, que con esto pueden ver que se puede llegar a jugar en las mejores series del mundo, ya que no ocurría hace más de veinte años. Estoy jugando en Italia desde el 2014”, cerró.