Por Sebastián Larocca
#PrimeraB – #Entrevista – Hace años que los socios del club Franja de Oro tienen el sueño del microestadio propio. Enfrente de la sede, ubicada en Avenida Amancio Alcorta 3960, está el predio con los quinchos y una pileta. En este último tiempo, el Futsal del club alquila las canchas de Nueva Estrella y Villa Modelo, para hacer de local. La suspensión hace unas semanas para hacer de local en el club de Villa Lugano, fue el motor que terminó de decidir en el socio y gran colaborador Claudio Carril para gestionar y ponerse al frente de la construcción de este microestadio.
Carril tuvo a sus tres hijos jugando en el Futsal del club y con su familia comparte una gran amistad y trabajo con Ariel Mauro, uno de los entrenadores de la Primera junto a José Abraham, otro de los históricos del club. Y también con Samanta Padra, presidenta de la actividad.
“Yo me dedico a la construcción desde chico. Mi viejo empezó con esta empresa y yo la multipliqué y la expandí por todos lados. Me enamoré del club, voy a ver el Futsal y me puse al frente de este sueño de construir el microestadio con las reglas FIFA para que lo disfrute Franja de Oro y toda la gente del barrio”, le contó Claudio Carril a Pasión Futsal, ante la inevitable emoción de algunos socios que presenciaron la entrevista.
La decisión de hacer el microestadio se tomó un domingo y ya el lunes se compraron los materiales y una grúa se hizo presente en Franja de Oro. “Las obras demandarán tres meses y el estadio tendrá todo lo que necesita para ser internacional, ya me comuniqué con la gente de AFA, que nos está asesorando”, continuó Carril.
“En mi vida profesional me fue bien y trato de devolverle algo a la gente que quiero. Franja de Oro es una familia. En mi vida personal y profesional se me acerca mucha gente a pedirme cosas. Acá me tratan como a uno más, nadie me pide nada”, sigue.
Samanta Padra, presidenta del Futsal, cuenta que “no nos entra tanta felicidad en el corazón. Nosotros estábamos alquilando en Nueva Estrella y Villa Modelo. Claudio y Verónica (su esposa) son amigos, sus hijos jugaron en Franja y acompañan al Futsal en este último tiempo. Empezó a sentir lo que contamos de esa mística que tiene Franja de Oro. Y bueno en el último partido, donde perdemos la localía por incidentes con Nueva Estrella. Me llama el lunes y me dice voy a ir al predio del club a tomar unas medidas. Y ese mismo lunes a las 18, había encargado los materiales para construir el estadio. Fue un sueño que se cristalizó en tres días. Él tiene una empresa que se llama Vial Norcar, que es una empresa gigante de vialidad y puso a trabajar toda su maquinaria para el futuro microestadio”.
El presidente del club, Rubén Marengo, que ocupa ese cargo hace 49 años, sentenció: “como en un cuento de niños, esos sueños que nos parecen inalcanzables, por un giro imprevisto de la vida, por la alineación de los planetas o no sé por qué designio, te lo hace realidad. También por algo más terrenal como es la audacia, el desinterés, la polenta de un grupo que no baja los brazos para alcanzar la utopía. Esa noticia que muchos de nosotros no hemos caído y que a muchos otros les explota el corazón de alegría, algo que va a acontecer con todos y cada uno de esta familia de Franja de Oro”.
Ariel Mauro es el entrenador del primer equipo y amigo personal de Claudio Carril, el mayor artífice de esta utopía. “Es una familia que estuvo siempre vinculada a Franja. Cuando los chicos dejaron de jugar, siguió esa relación. Yo trabajo con él y de acompañarnos a los partidos fue creciendo esa pertenencia, esa pasión que tiene cada uno de nosotros. Cuando perdimos la localía en Nueva Estrella, el lunes me dijo que iba a ir con el techista al predio a tomar medidas. Yo lo conozco, sé que hace muchas cosas y ayuda mucho, pero nunca nos imaginamos la magnitud del estadio que tenía pensado hacer. Creo que todavía ni sabe lo que está generando en el club, en el barrio. Y en él mismo, porque cuando pase el tiempo se va a dar cuenta que está haciendo algo histórico”.
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